GettyImages-2170740958.jpg
Aryna Sabalenka: Sentí el amor de la gente en Nueva York
03:03 - Fuente: CNN

(CNN) – A Aryna Sabalenka no se le negó alzar el trofeo de campeona del Abierto de Estados Unidos este año.

Sabalenka, la bielorrusa número 2 del mundo, derrotó a la estadounidense Jessica Pegula por 7-5 y 7-5 ante un público a favor de la local en el estadio Arthur Ashe, para ganar el US Open por primera vez.

Era el segundo año consecutivo que Sabalenka llegaba a la final del Abierto de Estados Unidos. Hace un año, perdió ante Coco Gauff, y el público neoyorquino no estuvo del lado de la bielorrusa, animando ruidosamente a la estadounidense.

Sabalenka admitió que el público la afectó en aquella final de 2023, y se había propuesto que eso no volviera a ocurrirle.

Tras ganar el punto de campeonato, Sabalenka cayó a la pista, embargada por la emoción.

Es el tercer título individual de Grand Slam de su carrera, tras ganar el Abierto de Australia por segundo año consecutivo en enero. Es la primera mujer que arrasa en los Grand Slams de pista dura desde Angelique Kerber en 2016.

Pegula, por su parte, había hecho un gran avance en el US Open de este año. Anteriormente, el mejor resultado de la jugadora de 30 años en un gran torneo fue alcanzar los cuartos de final, donde tenía un historial de 0-6 en esa fase. Con su resultado en Nueva York, ascenderá del nº 6 al nº 3 del mundo, igualando la mejor clasificación de su carrera.

Pegula se había perdido parte del calendario a principios de esta temporada, incluido el Abierto de Francia, debido a una lesión. Pero durante la gira norteamericana en pista dura de este verano, Pegula encontró su ritmo, con un balance de 15 victorias y 2 derrotas.

Esas dos derrotas fueron ante Sabalenka: en la final del Abierto de Cincinnati el mes pasado y el sábado en su primera final individual de un Grand Slam.

Sabalenka, de 26 años, ha ganado ahora 12 partidos consecutivos y ha mejorado su récord de enfrentamientos directos contra Pegula a 6-2.

Pegula, originaria de Buffalo, es hija de Terry y Kim Pegula, propietarios de los Buffalo Bills de la NFL y de los Buffalo Sabres de la NHL. Su familia la introdujo en el tenis a los 7 años, y recientemente dijo que llegar a la final del US Open era “un sueño de infancia”.

Cuando Pegula entró a la cancha del estadio Arthur Ashe para la final, se quitó los audífonos y pareció empaparse del ruido del público tras ser presentada.