Introduction: Paediatric LTI is associated with significant morbid-mortality. Although historically first line treatment was surgical, conservative management is making headway. The purpose of this study was to analyze the management and surgical indications of LTI treated at our institution.
Material and methods: Retrospective study of patients with LTI treated between 2007 and 2014.
Results: Six out of seven patients, with a median age of 4 years (2-15), had blunt traumas and one had an open trauma. Respiratory distress, pain and subcutaneous emphysema were presented in 71.4% of the patients. Five children were intubated (3 pre-hospital care and 2 after reaching the hospital), all of them underwent fibrobronchoscopy, determining the location, the extention, and assessing the possibility of extubation. Esophagoscopy was made in 2 cases. The remaining 2 cases were bounded to observation as they did not have respiratory symptoms or progressive emphysema, precluding bronchoscopy. Conservative management was followed in 71.4% of the patients, with a 100% success rate. Conservative management criteria were no progression of emphysema or respiratory distress, regardless the degree and location of the lesions. Two patients needed surgery: one tracheoesophageal fistula caused by a button battery, and the other was a tracheal open section associated with vascular injury. Both of them recovered uneventfully.
Conclusions: If the respiratory symptoms or the emphysema do not progress, patients with LTI can be managed conservatively, regardless of size or location of the injury. Associated esophageal lesions and open injuries require surgical management. An early diagnosis is mandatory in order to minimize morbidity and mortality.
Introduccion: Las lesiones laringotraqueales traumáticas pediátricas están asociadas a una importante morb-imortalidad. Aunque históricamente el tratamiento ha sido quirúrgico, en la actualidad el enfoque conservador ha adquirido una mayor importancia. Valoramos el tratamiento y las indicaciones quirúrgicas de los traumatismos laringotraqueales tratados en nuestro centro.
Material y metodos: Análisis retrospectivo de pacientes con traumatismos laringotraqueales del 2007 al 2014.
Resultados: Siete pacientes, mediana de edad 4 años (r: 2-15), 6 traumatismos cerrados y 1 abierto. El 71,4% presentaban dificultad respiratoria, dolor y enfisema subcutáneo. Cinco fueron intubados (3 en prehospitalaria y 2 en hospital). En todos ellos se realizó fibrobroncoscopia determinando la localización, la extensión de la lesión y la posibilidad de extubación. En dos de ellos se asoció esofagoscopia. Dos casos no presentaban clínica respiratoria y el enfisema no progresó por lo que se tomó una actitud expectante y no precisaron broncoscopia. El 71,4% se trataron conservadoramente, siendo el criterio de tratamiento conservador la no progresión del enfisema ni empeoramiento del estado respiratorio, independientemente del grado y localización de la lesión, con una tasa de éxito del 100%. Dos pacientes se intervinieron: una fístula tráqueo-esofágica producida por una quemadura (pila de botón) que requirió resección traqueal; y una sección traqueal abierta asociada a lesión vascular, ambas con correcta evolución posterior.
Conclusiones: En caso de no progresión de la clínica respiratoria o del enfisema, e independientemente del grado y localización, las lesiones laringotraqueales pueden tratarse de manera conservadora con o sin intubación. Lesiones esofágicas asociadas y lesiones abiertas obligan a un abordaje quirúrgico. Un diagnóstico precoz minimiza la morbimortalidad.
Keywords: Bronchoscopy; Conservative treatment; Laryngotracheal trauma; Paediatrics; Subcutaneous emphysema; Tracheal surgery; Tracheobronchial injuries.