¿Probióticos para prevenir catarros y resfriados?
Los probióticos son beneficiosos para la salud
Los probióticos son microorganismos vivos que administrados en las cantidades adecuadas proporcionan un efecto fisiológico beneficioso.
¿Qué efectos tienen los probióticos?
La evidencia disponible hasta ahora señala que la administración de probióticos es beneficiosa para tratar diarreas de origen infeccioso, para prevenir las diarreas asociadas al consumo de antibióticos y para tratar infecciones vaginales durante el embarazo.
Además, algunos estudios apuntan a que los probióticos podrían ayudar a prevenir infecciones del trato respiratorio superior : los probióticos tendrían un efecto positivo en la prevención de afecciones como catarros, sinusitis, faringitis o laringitis, por ejemplo.
No obstante, el mecanismo por el cual los probióticos aportan beneficios a la salud humana no está del todo claro, aunque las diferentes hipótesis disponibles giran todas en torno a la capacidad de los probióticos para mejorar nuestro sistema inmune.
Cochrane: buscando la evidencia científica
Una revisión Cochrane de la literatura científica, actualizada en2022, intenta, precisamente, aclarar esta cuestión: ¿los probióticos ayudan a prevenir las infecciones respiratorias del tracto superior?
¿Qué halló la revisión Cochrane?
La revisión localizó 23 ensayos clínicos que comparaban la eficacia de los probióticos (cualquier tipo de cepa o mezcla de cepas, a cualquier dosis y por cualquier vía de administración) frente a placebo o frente a no tomar nada para prevenir infecciones respiratorias agudas de las vías altas.
Trece de estos ensayos se habían realizado en población infantil de 1 mes a 11 años de edad; siete en población adulta con una edad media de 37,3 años y tres en personas mayores con una edad media de 84,6 años de edad.
El resultado de la revisión de estos ensayos clínicos encontró que las personas que habían recibido probióticos sufrían menos infecciones agudas del tracto respiratorio superior. En concreto se observaba que:
- El número de personas que sufrían al menos tres infecciones era de 129 por cada 1.000 en quienes habían tomado placebo (o no tomaron nada), grente a 76 personas por cada 1.000 en quienes habían tomado probióticos. El riesgo de sufrir infecciones respiratorias agudas de vías altas en un 41%.
- El número de personas que sufrían al menos una infección también se reducía en quienes tomaron probióticos: 447 casos por cada 1.000 personas en quienes tomaron placebo o nada y 340 casos por cada 1.000 en los que tomaron probióticos. Al tomar probióticos se reducía el riesgo un 24%.
- También se vio que en las personas que, a pesar de estar tomando probióticos, desarrollaban una infección aguda de vías altas, la duración de esa infección era menor que en los demás: concretamente, 1,22 días menos.
- Otro de los hallazgos era que, entre quienes tomaban probióticos se daban menos infecciones a lo largo del año, es decir, la incidencia de casos disminuía en un 18% con respecto a quienes tomaban placebo o nada. Y usaban menos antibióticos para el tratamiento de este tipo de infecciones que quienes tomaban placebo o nada. En concreto, tomar probióticos reducía la probabilidad de tomar antibióticos en un 42%.
Conclusiones con certeza moderada
El nivel de certeza de los hallazgos de una revisión depende, entre otros factores, del número de ensayos clínicos que aporten resultados y de lo bien que hayan sido realizados, por tanto, no todos los hallazgos conllevan el mismo nivel de certeza.
Los autores de esta revisión concluían que, con un nivel de evidencia moderado, los probióticos probablemente reducen el número de personas que sufren infecciones respiratorias de vías altas y probablemente reducen el número de personas que deben tomar antibióticos para el tratamiento de este tipo de infecciones. Sin embargo, con un nivel de certeza bajo, podrían reducir el número de infecciones respiratorias de vías altas que una persona sufre a lo largo del año y la duración de este tipo de infecciones.