Préstamos desde un euro con Quanloop, ¿mejor que una hucha?

Si ha visto publicidad de Quanloop en Internet, ofreciendo rendimientos desde un 5,5% hasta un 15,7% anual – según ellos, son “mejor que una hucha” –, puede haber pensado que es un banco muy generoso. Una vez visite su web le hablarán de contratos de micro préstamos y de planes garantizados por una lista de garantías colaterales; y se atreven a decir que “en términos prácticos, Quanloop puede parecer una plataforma de crowdfunding, aunque actúa como un fondo de inversión.” ¿De verdad?

Al igual que los productos milagro que abusaban de una terminología pseudocientífica para vender el producto que le haría adelgazar 20 kilos en una semana o la crema rejuvenecedora que con tres aplicaciones borraría los rastros de 60 años de envejecimiento en su rostro, mezclan en sus mensajes un montón de términos de inversión que pueden llevar fácilmente a error. Veamos qué es esta plataforma realmente.

Se trata de una LPF (Limited Partnership Fund) con domicilio y acogida a la muy flexible legislación de Estonia. Este tipo de LPF estonias son sociedades de responsabilidad limitada, que funcionan como un instrumento de capital riesgo pensado para atraer la gestión de grandes patrimonios privados y no tanto para atraer la gestión colectiva. Los pequeños inversores prestan su dinero a esta sociedad LPF y es Quanloop Group OÜ, su socio propietario, con la ayuda de un gestor profesional llamado Bondkick AS quien lo invierte. Ahora bien, este último está calificado como gestor de un pequeño fondo sin necesidad de licencia, y en la práctica le basta registrarse como tal en la FSA (la CNMV de Estonia) para cumplir con la normativa sin recibir más supervisión posterior del regulador. En cuanto a lo que hacen con su dinero – si lo prestan a empresas o a otro fin –, tiene que creer lo que le cuenten.

• Por tanto, decir que es un fondo de inversión es engañoso, pues no hay un patrimonio perteneciente a los partícipes en manos de una depositaria ajena a la gestora, ni supervisión de su operativa por organismo alguno. Y tampoco es una plataforma de crowdfunding, porque usted no le presta a nadie más que a la LPF.

• En definitiva, no son ni un banco, ni una plataforma de crowdfunding, ni un fondo de inversión. O al menos, como en España se entienden tales conceptos. En caso de insolvencia de Quanloop no contará con fondo de garantía alguno que venga a paliar el mazazo. Y al tratarse de una sociedad limitada solo responderá con los bienes de la propia compañía (siempre que haya). Si en algo valora su dinero, hará bien en no depositar ni un solo euro en entidades en las que, de haber problemas, podría salir más que escaldado.