Marie Claire

Viaje al pasado de Taylor Swift... ¿Sabes cuánto ha cambiado?

Una de las mujeres más poderosas del mundo, con más seguidores, capaz de llenar estadios noche tras noche y elaborar melodías que se te cuelan en el subconsciente... Hace mucho que conocemos a Taylor Swift, pero puede que ya no te acuerdes de cómo era cuando entonaba 'Love Story'.

Una de las mujeres más poderosas del mundo, con más seguidores, capaz de llenar estadios noche tras noche y elaborar melodías que se te cuelan en el subconsciente... Hace mucho que conocemos a Taylor Swift, pero puede que ya no te acuerdes de cómo era cuando entonaba 'Love Story'.

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Corría el año 2008 cuando una adolescente Taylor Swift se disfrazó de princesa del siglo XVIII y le cantó al amor más romántico con aquel Love Story. Sí, han pasado tantos años que, a veces intentar recordar a la tierna e inocente Taylor se nos hace difícil. Que prácticamente con cada álbum la cantante cambia de look no es ningún descubrimiento, sin embargo, hoy analizamos todo su cambio físico (igual que ya hicimos con Bella Hadid), desde su cabello, su maquillaje o sus cambios de peso hasta cómo sus ojos comenzaron a verse más grandes o ese rumor de que supuestamente se operó la nariz y los pechos. Como no hay nada como unas cuentas pruebas gráficas para destapar el pastel, nos remontamos al 2008...

Por aquel año Taylor Swift era una joven cantautora country que llevaba el cabello ultra rizado y por lo que hemos podido descubrir, no es que su pelo fuera así de ondulado, sino que, más bien era adicta a las tenacillas. Durante mucho tiempo la persona encargada de la imagen de Taylor, su maquillado y peluquera... Inclusi quien le pintaba aquel mítico '13' en la mano, no era otra que su madre... Aquí, te confieso que lo descubrí gracias a mi querido y admirado Sebas G Mouret, casi su biógrafo en España. Gracias Sebas. 

Puede que esta sea la clave de la evolución de la imagen de Taylor Swift. Además de sus rizo muy marcados y llegando a rozar en el bucle de muñeca, su maquillaje también dejaba bastante que desear. Los smokey eyes fueron durante los primeros años de su carrera su maquillaje estrella. Su difuminado no sobrepasaba la almendra del ojo y los colores siempre eran muy fríos y oscuros... Sus cejas, redondeadas y casi inexistentes demostraban que, definitivamente no sabía qué hacer para llevar las cejas perfectas.

Pero, en 2011, a raíz del lanzamiento de Red, la cantante dejó atrás la imagen de chica inocente del country y se pasó al pop, reinventando su imagen y combinando magistralmente el look retro con su ya peredne flequillo. Los smokey tornaron en el delineado más preciso y rasgado del mundo de la música y sus labios se entintaron de rojo, convirtiendo el look en su seña de identidad.

Pero le rompieron otra vez el corazón (porque prácticamente con cada disco y con cada cambio de look hay una ruptura sonada) y Taylor Swift cortó por lo sano y se pasó a la "melenita francesa", un corte de pelo entre el bob y el midi que se convirtió en el peinado más mono de todos los que estaban de moda en 2014-2015 y su hasta entonces imagen aniñada tomó un rumbo mucho más sexy, luciendo tipazo y piernas kilométricas. Durante esta etapa, la del álbum 1989, su esbelta figura fue muy señalada por ser demasiado delgada...

Y llegamos entonces a la actualidad. Muchas rupturas después, con decenas de premios en la bolsa y con un novio que promete convertirse en una estrella de Hollywood, Taylor ha vuelto a dejarse el cabello largo y lo lleva con ondas muy naturales, mostrando una Taylor más cercana y menos perfecta, que presume de curvas y jamás renuncia a sus eternos red lips.

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