Mujeres del mar: inspirando vocaciones

Con una historia de más de 400 años ligada a la construcción de buques para la Armada, y un futuro abierto a las tecnologías disruptivas y las energías verdes como el hidrógeno y la energía eólica marina, esta empresa es un ejemplo de cómo el talento femenino tiene un gran potencial en la industria naval.

Referentes femeninos

Navantia, empresa pública de construcción naval civil y militar estratégica para la defensa de España, con el ánimo de ser una compañía diversa y con igualdad de oportunidades, inició en 2018 su Plan Estratégico para impulsar la inclusión y la evolución cultural en todos los ámbitos de la compañía.

En la actualidad llevan a cabo iniciativas y proyectos para fomentar el talento femenino e impulsar el papel de la mujer dentro de la compañía. 

Una de ellas, impulsada por el departamento de Recursos Humanos, es su programa "Referentes Femeninos", que cuenta con el compromiso de los miembros del Comité de Dirección, que intercambian experiencias, retos y desafíos con las empleadas de Navantia a través de sesiones mentorizadas.

Pero "Referentes Femeninos" no es sólo un programa de mentoring, va mucho más allá: su principal objetivo es proporcionar visibilidad, mejorar la marca personal y fomentar el networking entre compañeras de distintas áreas.

Con esta iniciativa, Navantia pretende garantizar la igualdad de oportunidades, para que las trabajadoras puedan seguir aportando en los grandes retos y desafíos a los que se enfrenta la compañía.

Promoviendo valores

Sostenibilidad, Orgullo, Modernidad, One Team y Superación. Estos cinco pilares, bajo las siglas SOMOS, son claves para Navantia. La compañía tiene un foco claro en la Sostenibilidad a través de Navantia Seanergies (dirección de energías verdes) y la estrategia de ESG (Environmental, Social & Governance).

En Navantia, se fomentan e impulsan las actividades empresariales relacionadas con las energías verdes, la eólica marina y el hidrógeno. 

Por otro lado, los más de 400 años de historia de Navantia están apoyados en una forma ética y profesional de hacer las cosas y en el sentimiento de pertenencia de los trabajadores, que sienten Orgullo de formar parte de una empresa que acelera la economía del sector naval y del sector de las energías.

En cuanto a su apuesta por la Modernidad, su principal motor de crecimiento y desarrollo es la innovación tecnológica. One Team, por su parte, alude a su carácter de empresa global, con un equipo orientado a conseguir el mismo objetivo y a continuar creciendo internacionalmente.

En su afán de Superación apuestan por el factor humano, con equipos orientados a la mejora continua, donde los empleados puedan crecer personal y profesionalmente.

"El porcentaje de ingenieras debe aumentar en las empresas industriales"

Mónica Landeira Ogando, responsable del programa ELCANO de Navantia (Astillero de Ferrol), siempre tuvo claro que estudiaría una ingeniería porque siempre le llamaron la atención las carreras técnicas.

"Me decanté por la ingeniería industrial por su versatilidad. Lo de desarrollar mi carrera profesional dentro de la construcción naval ha sido más una casualidad. La escuela de Ingeniería donde estudié estaba muy cerca del astillero y tuve la oportunidad de hacer una beca en la factoría de Turbinas en Navantia".

Actualmente, en la universidad donde estudió, el porcentaje de mujeres es del 18%. "Este porcentaje debe aumentar para poder pensar en equiparar los roles dentro de las empresas industriales. Espero que un reportaje como este sirva para que más chicas se planteen hacer carreras técnicas", señala la ingeniera responsable del programa ELCANO de Navantia.

ELCANO es un nombre muy significativo para la Armada Española. Es el nombre de su Buque Escuela y, además, Navantia también lo ha escogido para llamar a la Plataforma Digital que están implementando.

"ELCANO es un conjunto de softwares conectados entre sí que cubre la vida de nuestro producto 'buque': desde el diseño en sus primeras fases hasta la operación y mantenimiento. Esta plataforma supone una inversión muy importante para Navantia y es uno de los fundamentos de nuestro Plan de Transformación Digital".

"Les diría a las jóvenes que confíen en su capacidad y que sigan su pasión"

Elena Corrales Estarico, directora de Desarrollo de Sistema Colaborativo de Navantia Seanergies (Astillero de Puerto Real), estudió Ciencias del Mar por vocación. "Soy canaria y crecí en Cádiz; siempre he vivido junto al mar. Estudié oceanografía para poder conocer y comprender mejor el océano, y porque quería contribuir a protegerlo", comenta Elena Corrales.

Navantia es una empresa dedicada a la economía azul. Desarrolla proyectos en el sector eólico marino y en el sector del hidrógeno desde su división Navantia Seanergies, como una fuerte apuesta de la compañía por el desarrollo de las energías sostenibles.

"Trabajo como responsable del desarrollo estratégico de Navantia Seanergies, división en la que llevamos a cabo proyectos vinculados al mar que contribuyen a la transición energética y a la mitigación del cambio climático".

La descarbonización de la economía es un gran desafío a nivel internacional, y a su vez una gran oportunidad para impulsar un desarrollo económico sostenible y comprometido socialmente.

"Tengo la suerte de dedicarme a algo que me apasiona, alineando mis valores y mi vocación", apunta Elena, que anima a las jóvenes interesadas en carreras del sector de las energías verdes a que no se dejen intimidar por los estereotipos o las barreras que puedan encontrar.

"Les diría que confíen en su capacidad. Que sigan su pasión, y que se preparen con formación y experiencia para demostrar su valía y su potencial". 

"Las mujeres que se incorporen al sector naval serán el motor del cambio"

Lucía Fariña Freijomil, HRBP del Negocio de Fragatas y Buques de Intervención (NFBI) (Astillero de Ferrol), como Human Resources Business Partner, trabaja de manera estrecha con los managers de cada una de ellas con la finalidad de lograr la consecución de los objetivos corporativos y garantizar el bienestar de las personas que forman sus equipos de trabajo.

Entre sus funciones está la de detectar el talento humano que tiene Navantia en estas áreas y desarrollarlo, ajustando los perfiles a los puestos en los que generan más valor. Anima a todas las mujeres que apuestan profesionalmente por una carrera técnica (STEM, FP Dual, ciclos formativos, etc.), a incorporarse al sector naval:

"Les va a permitir ser motor del cambio, desarrollarse profesionalmente y participar en procesos innovadores basados en las últimas tecnologías digitales e inteligencia artificial".

Y resalta que "las nuevas generaciones darán continuación a la gestión del cambio que nos llevará a poder ofrecer buques militares y civiles, que son y serán toda una referencia a nivel internacional".

En el caso de Navantia, la empresa cuenta con procesos de desarrollo para aumentar el porcentaje femenino en los puestos directivos y de responsabilidad.

"La seguridad digital ha venido a sumarse a los riesgos tradicionales"

Nasek Perrino Al-Haffar, responsable de la Oficina de Seguridad de Navantia (Oficinas Centrales de Madrid). Los riesgos de seguridad de las empresas en la actualidad son cambiantes y no paran de evolucionar.

Las compañías se ven obligadas a transformar constantemente sus modelos y planes de seguridad para poder seguir garantizando la seguridad de personas y bienes en sus instalaciones.

"En el ámbito concreto de la construcción naval hablamos tanto de riesgos de seguridad física como de riesgos de seguridad digital, puesto que en Navantia estamos inmersos en una transformación para la mejora de los procesos y herramientas de toda nuestra cadena de valor, que incluye la renovación de nuestros centros de producción para incluirlos en un ecosistema digital que denominamos Astillero 5.0", explica Nasek Perrino.

Esta es responsable de la Oficina de Seguridad de Navantia en Madrid, quien llama la atención sobre cómo la seguridad digital ha venido a sumarse a los riesgos tradicionales (de seguridad física) en los que solemos pensar cuando hablamos de seguridad industrial.

Cuando la preguntamos sobre su experiencia personal en el sector de la seguridad en las empresas, hasta hace poco dominado por hombres, señala la buena relación que existe con todos sus compañeros: "Hay mucho trabajo en equipo en Navantia. Mi experiencia en este sector ha sido muy positiva".

"Es un orgullo para mí contribuir a la seguridad nacional"

Laura Correa Mendioroz, Directora de Reparaciones de Navantia (Astillero de Cartagena), tenía claro que durante el Bachillerato que estudiaría una ingeniería. "Me sentí atraída por la ingeniería naval debido a mi interés en el diseño y la construcción de barcos, pero, sobre todo, por las estructuras marinas y sistemas marítimos", comenta Laura.

Como directora de Reparaciones en el astillero de Cartagena, nos explica qué tienen en común abordar un buque civil y uno militar: "Los buques militares se caracterizan por disponer de requisitos más elevados de seguridad y defensa”.

“Además de tener un grado de sensibilidad a la información elevado, de precisar requerimientos técnicos muy estrictos y de procedimientos de inspección y certificación muy rigurosos debido a las regulaciones y normativas específicas del ámbito militar. Y el cliente civil del mega yate aprecia que traslademos estos procedimientos a sus proyectos".

El astillero de Navantia en Cartagena se encuentra en una posición estratégica en el Mediterráneo, ya que está en el punto de paso de todos los yates y veleros que cruzan desde el Mediterráneo al Atlántico rumbo al Caribe.

Entre los aspectos más gratificantes de su trabajo en el ámbito militar destaca "el orgullo de contribuir a mantener la capacidad operativa de nuestras fuerzas navales y servir a la seguridad nacional".

"De estudiante visité Navantia y supe que quería trabajar allí"

Yaiza García Zambrana, soldadora de Navantia (Astillero de Cartagena). En casa de Yaiza siempre se utilizaron mucho las herramientas, y desde muy pequeña desarrolló su interés por oficios como el de soldadora.

"Durante una FP que estaba realizando nos trajeron de excursión a Navantia; desde ese momento supe que quería trabajar aquí y no paré hasta conseguirlo", explica. Sus responsabilidades como soldadora abarcan desde tener el conocimiento necesario en cada momento para hacer frente a cualquier tarea que se le asigne como utilizar los equipos de trabajo y de seguridad, "y hacerlo siempre con la máxima calidad".

En Navantia utilizan toda clase de soldaduras, máquinas y materiales, pero lo más habitual es trabajar con electrodo por los procedimientos que se les exigen. "Cuando entramos a trabajar en esta empresa, primero recibimos varios meses de formación en la escuela de soldadores, hasta realizar los exámenes que homologan lo aprendido".

Todos los trabajos de este oficio son verificados minuciosamente por el personal encargado del control de calidad de Navantia mediante múltiples ensayos, "desde una inspección visual hasta radiografías para observar hasta el más mínimo detalle".

¿Su gran desafío como soldadora? "Haberme hecho un hueco en esta empresa y participar en una unión de secciones del submarino, ya que es el trabajo de mayor envergadura con el que contamos".