Marie Claire
patrocinado por ivi

Ser madre gracias a la reproducción asistida

Retrasar la maternidad es uno de los motivos que complican concebir un bebé, pero gracias a los tratamientos de fertilidad actuales cada vez más mujeres logran su deseado embarazo.

Publicado por

Creado:

Actualizado:

Los últimos datos sobre el descenso de la natalidad en España publicados por el INE son contundentes: en 2023 se alcanzó la cifra más baja de nacimientos desde que comenzaron a registrarse en 1941. Esto viene acompañado, inevitablemente, del retraso en la edad de maternidad. Son muchas las mujeres que posponen el momento de ser madres hasta que las circunstancias sean las adecuadas: estabilidad económica, planes de estudio o trabajo… Pero, en muchas ocasiones, no se tiene en cuenta un factor muy importante en lo que a ser madre se refiere: la fertilidad.

En la mayoría de los casos, por desconocimiento. Porque ahora seguimos una vida más saludable -en términos de deporte y alimentación-, porque tenemos vidas más activas que hace décadas, pero los óvulos no siguen ese ritmo. Los ovarios tienen su propio reloj y no esperan a nadie ni nada. Es ante estos casos cuando la reproducción asistida aparece para poder hacer realidad el deseo de ser madre. Quizá hasta este escenario es en el que tú te encuentras. Por ello, hablamos con la doctora Anabel Salazar, ginecóloga especialista en medicina reproductiva y directora de la clínica IVI Málaga.

¿Cada vez somos menos fértiles?

La Sociedad Española de Fertilidad estima que una de cada seis parejas tiene problemas para tener hijos, esto supone que la enfermedad afecta a entre el 15 y el 20 % de las parejas. "Además de la edad, que es el primer factor de infertilidad, sobre todo en la mujer, en la última década se observa prevalencia de otros factores: hábitos de vida poco saludables, sobrepeso, contaminantes ambientales… Pero, de forma indiscutible, el primer factor de infertilidad en la mujer es la edad.

Hay que tener en cuenta que la edad a la que se busca el primer hijo en España está entre los 32 y los 33 años, y que el punto álgido en la fertilidad femenina está en torno a los 25", explica la experta. Y añade: "Además, en el caso de la mujer hay que hablar también de si existe presencia de patologías que pueden afectar a la fertilidad, como el síndrome de ovario poliquístico o la endometriosis. Una de cada diez mujeres en edad fértil tiene endometriosis, una de las causas más difíciles de solucionar. De ellas, el 50 % presentan infertilidad a causa de esta patología. Y a eso le debemos sumar que, en muchos casos, acuden a las consultas de medicina reproductiva cada vez más tarde.

Getty Images

Getty Images

Cuando sumas el factor edad y una patología, como la endometriosis, se hace necesario buscar otro tipo de soluciones. En el caso del síndrome de ovario poliquístico, va muy ligado al sobrepeso y la obesidad. Estamos en un momento en la sociedad en el que cada año aumentan los índices de prevalencia de obesidad y sobrepeso, sobre todo en gente joven. Por otro lado, también haber pasado una enfermedad o infección de transmisión sexual afecta a la fertilidad. Muchas veces son asintomáticas, no se sabe que se tiene. Puede haber derivado en un problema en las trompas de Falopio y no saberlo".

A partir de los 35 años de edad la fertilidad femenina empieza a decaer considerablemente

Lo que no es un factor causante de infertilidad es el estrés. ¿Cuántas veces las mujeres que están en la búsqueda habrán tenido que oír relájate y te quedarás embarazada? "Pues no, relajarse no embaraza. Las emociones, como es lógico, forman parte de este proceso, pero hasta ahora no se ha demostrado ninguna relación directa entre estrés e infertilidad", apunta la doctora. Por otro lado, si hablamos de la fertilidad masculina, en los últimos años se observa de forma generalizada una menor concentración de espermatozoides, menor movilidad y morfología alterada. El descenso en la calidad seminal también afecta a las probabilidades de lograr el embarazo y de que este llegue a término.

No obstante, como comenta la doctora Salazar, el primer factor de infertilidad es la edad: "Si se intenta ser madre a una edad más avanzada, es más probable encontrar barreras para conseguirlo. La recomendación es la de consultar a un especialista pasados los 12 meses de relaciones sexuales sin que se consiga el embarazo. Si la mujer es mayor de 35 años, si presenta alguna patología o si alguno de los dos miembros de la pareja se ha sometido a alguna intervención o tratamiento que pueda haber afectado a la fertilidad, se debe acudir a una clínica de reproducción asistida pasados los seis meses de búsqueda del embarazo de forma espontánea", añade la doctora.

Planificar la maternidad para más adelante

Ante una sociedad que está alcanzando mínimos históricos en nacimientos, ¿es conveniente planificar la maternidad? La respuesta de la doctora es clara: "La edad es un factor decisivo en todo lo relacionado con la maternidad. Debemos tomar conciencia sobre el efecto del paso del tiempo en los óvulos: menor cantidad de reserva ovárica y menor calidad en los que quedan disponibles. Esto se traduce en una mayor probabilidad de que los embriones que se consigan sean cromosómicamente anormales. Esto, a su vez, deriva en mayores probabilidades de que este no implante en el útero, de aborto espontáneo o de presencia de alguna alteración genética en el bebé".

Para todas aquellas mujeres que quieran ser madres es importante dar a conocer la técnica de la vitrificación de ovocitos. "Esta técnica nos permite planificar la maternidad, preservando los óvulos bajo unas condiciones que mantienen la calidad y características que estos tenían en el momento de preservarlos". Es algo así como 'parar el tiempo' para esos ovocitos y que no sigan su propio reloj. Pero, como en todo, el momento para realizar la vitrificación también es importante.

Getty Images

Getty ImagesMilos Jokic

La recomendación es la de hacerlo, a ser posible, antes de los 35 años. A partir de esta edad la fertilidad femenina empieza a decaer. La técnica también está disponible para los hombres. Aunque no suele ser tan común, en clínicas como IVI también criopreservan gametos masculinos. Si bien a los hombres no les afecta tanto el paso del tiempo, también lo hace. Ello, junto al estilo de vida, los contaminantes ambientales… hacen decaer la fertilidad en los varones.

Los gametos pueden estar preservados el tiempo que se requiera, ya que el tiempo de criopreservación no disminuye la calidad de óvulos o espermatozoides. Esto hace de la técnica de vitrificación una fantástica opción para ampliar la familia. "Si empezamos a ser madres a una edad 'tardía' y queremos tener más de uno, cuanto más tiempo pase, mayores dificultades habrá para lograrlo. El tener los óvulos 'guardados' es una tranquilidad", añade la doctora.

Si el embarazo no llega debido a la edad

"En IVI, más de la mitad de nuestras pacientes tienen 40 años o más, y somos expertos en este tipo de casos de alta complejidad. Y así lo dicen las cifras, auditadas por la Sociedad Española de Fertilidad, si hablamos del éxito alcanzado en tratamientos de Fecundación In Vitro (FIV) rozamos el 90 % (acumulado a tres intentos), un 10 % más que la media de nuestros competidores. Nuestro objetivo siempre es que nuestras pacientes tengan en casa un bebé sano, en el menor tiempo y con las mayores garantías. Para ello contamos con una amplia cartera de tratamientos, que se adaptan a la etapa vital de nuestras pacientes. Además, los personalizamos a cada diagnóstico.

Por ejemplo, si hablamos de FIV, contamos con la alternativa FIV Genetic, que combina el tratamiento de Fecundación In Vitro con el diagnóstico genético preimplantacional. Es decir, cuando antes hablábamos que, a mayor edad, mayor probabilidad de embriones cromosómicamente anormales, en edad materno-avanzada nuestra recomendación prácticamente en la totalidad de los casos será realizar este test. En el caso de este tratamiento específico, en IVI alcanzamos un 30 % de éxito más que la media de competidores", señalan desde la clínica.

Sin duda, las tasas de éxito suponen un aspecto importante a valorar a la hora de elegir un centro. El tratamiento FIV tiene otra variante, la ICSI. Un procedimiento en el que se extrae un espermatozoide –bien de una muestra de semen o mediante biopsia de testículo– para seleccionar los más adecuados y microinyectarlos posteriormente en el óvulo.

Una técnica para cada caso

La inseminación artificial es una técnica de baja complejidad recomendada principalmente en casos de pacientes con buena reserva ovárica. Se trata de un tratamiento que, en comparación con la fecundación natural, mejora las tasas de éxito. En un siguiente escalón de complejidad encontraríamos la fecundación in vitro, probablemente la más conocida. "Es la técnica ideal cuando la paciente presenta alguna patología o cuando es necesario realizar un test genético preimplantacional a los embriones. Por último, en lo que a medicina reproductiva de alta complejidad se refiere, contamos con la ovodonación o las técnicas de rejuvenecimiento ovárico".

iStock

iStockYuri Arcurs

Y la doctora añade: "El primer paso, y además fundamental, es realizar un buen diagnóstico de la fertilidad: completo, certero y a tiempo. Es ahí cuando sabremos escoger entre uno u otro tratamiento, teniendo en cuenta también el deseo de la propia paciente o la pareja. Y, además, también de gran importancia, en base a los resultados, a las características específicas de la paciente o de la pareja, personalizaremos el tratamiento. La medicina reproductiva de precisión y efectiva pasa por la aplicación de estrategias de estimulación ovárica personalizadas. Consiste en individualizar los protocolos de medicación hormonal a la paciente, en base a su edad y los resultados de las distintas pruebas diagnósticas".

Además, en IVI enfocan cada caso desde una perspectiva 360º. Por ello cuentan con diferentes unidades especializadas que giran en torno a la medicina reproductiva, porque cada caso es único y hay algunos que requieren un abordaje multidisciplinar. Desde la ya mencionada genética reproductiva que, como nos explica la doctora, "es uno de los hitos de la última década en reproducción asistida, cuyo objetivo es evitar la transmisión de enfermedades genéticas a la descendencia", pasando por la unidad de tratamiento de la endometriosis, que ofrece una atención integral a las pacientes que sufren esta patología, cuya calidad de vida se ve mermada, además de atajar la progresión de la enfermedad en pro de su fertilidad. Hasta llegar a unidades que estudian, diagnostican y tratan las alteraciones inmunológicas que pueden incidir o dificultar el embarazo.

"Conseguir embriones de buena calidad es fundamental, pero el útero también juega un papel importante en el éxito del tratamiento. El objetivo, en este caso, es conseguir el mejor útero posible para que reciba al embrión en las mejores condiciones y que este se desarrolle, llevando la gestación a término", explica la doctora Salazar.

Rejuvenecimiento ovárico, cuándo acudir a él

Se trata de una alternativa para aumentar el éxito de los tratamientos con ovocitos propios. "En IVI somos pioneros en las técnicas de rejuvenecimiento ovárico, fruto de nuestra labor investigadora. El objetivo es minimizar el efecto de la insuficiencia ovárica para que cada vez más pacientes cumplan el deseo de ser madres con sus propios óvulos. Se trata de tres técnicas, diferentes entre sí: terapia con células madre, reimplante de tejido ovárico o inyección de plasma enriquecido con factores de crecimiento", señalan desde la clínica.

Laura (nombre ficticio) es paciente de IVI Pamplona y acudió al Centro de Excelencia en Rejuvenecimiento Ovárico en IVI Alicante. Descubrió a los 37 años, de casualidad, que su reserva ovárica era muy baja. Tan baja, de hecho, que se podía comparar con la de una mujer de 50 años. Para esta paciente, recién casada y con el objetivo de ser madre, fue un jarro de agua fría. 

Clínica IVI

Clínica IVI

En esa misma consulta su ginecólogo le dijo que podía olvidarse de ser madre con sus propios óvulos. Fue a partir de ahí que tuvo que hacerse una experta en términos como 'hormona antimülleriana' o 'reserva ovárica', que hasta ese momento desconocía. Porque, nos cuenta, si algo ha aprendido durante este proceso es que las mujeres están muy poco informadas y cuidadas respecto a su fertilidad. Buscó un sitio en el que, en lugar de malas noticias, le dieran la información y la atención para intentar ser madre.

Fue así como llegó a IVI, que abrió su Centro de Excelencia en Rejuvenecimiento Ovárico, pionero en el mundo, en 2021. Primero pasó por IVI Pamplona, la clínica de ciudad, para iniciar el proceso de Fecundación In Vitro; pero sólo obtuvo un ovocito válido. Empezó entonces su camino en el rejuvenecimiento ovárico, combinando citas online con los expertos de IVI Alicante, pruebas que se realizaba en su ciudad y finalmente una visita al Centro de Excelencia para realizar el tratamiento, totalmente personalizado a su diagnóstico y edad.

Era como oro líquido, pero hoy en día pienso que era aún más valioso que el oro

Recuerda que la enfermera le enseñó el líquido dorado -plasma enriquecido- que le iban a inyectar en los ovarios. "Era como oro líquido, pero hoy en día pienso que era aún más valioso que el oro". Después de realizarse esta técnica, ya de vuelta en IVI Pamplona, en un segundo ciclo de FIV se obtuvieron 8 ovocitos válidos, que decidieron vitrificar. Y en ese momento, Laura y su pareja recuperaron la esperanza de poder ser padres, viendo que el tratamiento de Rejuvenecimiento Ovárico había funcionado. Optaron por hacer una tercera estimulación, en la que consiguieron otros 5 ovocitos válidos. Después de eso, 3 embriones sin ninguna anomalía genética, y meses después la transferencia de uno de ellos. Hace dos meses dio a luz a su bebé.

"No tengo ninguna duda de que si hoy tengo a mi bebé en brazos es gracias al rejuvenecimiento ovárico de IVI, porque de otra forma no habría podido ser madre con mis propios óvulos. Podría haber sido madre de otra manera y habría sido igual de válido, y yo igual de feliz, pero tener esta posibilidad, que era mi primera opción, es algo que para mí tiene un valor incalculable. Todavía hoy doy gracias a todo el equipo, a todos los que investigaron para hacer realidad esta técnica. Gracias a todos ellos soy madre".

Cuando el problema está en los óvulos de la paciente

En ese caso el tratamiento idóneo es la ovodonación. En muchos casos la maternidad se deja para más adelante y, aunque nos gustaría, la biología no suele seguir el mismo camino o ritmo que las aspiraciones personales. Las mujeres nacen con un número finito de óvulos, que desciende cada mes, fruto de un proceso natural.

El tratamiento con óvulos donados es una opción que, de primeras, muchas pacientes rechazan por miedo, o por el 'duelo' de no aportar su carga genética en los embriones. Sin embargo, como comenta la doctora, "a pesar de ello, se trata del segundo tratamiento más realizado en nuestras clínicas –además, una de cada cuatro pacientes lo escoge como su primera opción– y gracias al cual miles de mujeres pueden cumplir su deseo de ser madres". 

El segundo tratamiento más realizado en IVI es la donación de óvulos

La ovodonación es el tratamiento más seguro y que mayores tasas de éxito alcanza (99 % acumulada a tres intentos). Este tratamiento destaca principalmente por la seguridad, en términos de las pruebas médicas que se realizan a las posibles donantes. "Además, en IVI contamos con la tecnología Perfect Match 360º, para garantizar la máxima compatibilidad genética, así como las similitudes físicas y biométricas, entre paciente receptora y donante. Esta tecnología nos ayuda a reducir los miedos o las barreras que tienen las pacientes y esa duda de si su bebé se parecerá a ellas".

Una preocupación común a muchas de las pacientes a las que se recomienda recurrir a la ovodonación es si este tratamiento es la última alternativa. Al contrario, se trata de una opción totalmente válida, clave en muchos casos para conseguir el deseo de ser madre. "La ovodonación es un tratamiento más dentro de los disponibles. Cada uno tiene sus particularidades y está más orientado para un tipo u otro de paciente. En este caso, se hace especialmente recomendable para pacientes con diagnósticos más complejos y en los que hemos de buscar la calidad ovocitaria por encima de la cantidad. 

No obstante, entendemos que el camino de la reproducción asistida, en general, y este tratamiento, en particular, no es sencillo. Muchas veces el primer freno ya es asumir que se necesita ayuda de la medicina reproductiva para alcanzar el deseo de maternidad, más aún en este tipo de tratamiento. Por ello en IVI contamos con profesionales de la psicología especializados en nuestro campo, que pueden ayudar y acompañar a las pacientes en este proceso, enseñando a modular las emociones", añade la Dra. Salazar.

En la imagen, María, paciente con endometriosis que consiguió quedarse embarazada de su hija gracias a un tratamiento de ovodonación en la clínica IVI de Mallorca.

En la imagen, María, paciente con endometriosis que consiguió quedarse embarazada de su hija gracias a un tratamiento de ovodonación en la clínica IVI de Mallorca.

María es paciente de ovodonación, madre sin pareja, que llegó a IVI Mallorca con 37 años, diagnosticada de endometriosis en grado IV, dificultades biológicas, y rechazada en la Seguridad Social. Cuando inició su camino en reproducción asistida quiso probar con sus óvulos. A pesar del resultado del estudio de la reserva ovárica no se planteó en ese momento la calidad de sus óvulos. "Y eso es lo primero que debe plantearse una mujer que afronta este proceso, porque si yo lo hubiera hecho, a lo mejor mi hija hubiera llegado un poco antes", comenta.

La ovodonación es la gran desconocida, nos cuenta. Lo primero que se planteó, en parte por desinformación, en parte por pensamientos arraigados por cultura y tabúes sociales, es "no llevará mi sangre", "no va a ser mía". A raíz de su propia experiencia, nos dice que, si no normalizamos los problemas de fertilidad y no los hablamos, no nos daremos cuenta de la cantidad de mujeres, cada vez más, que no encuentran el espacio en el que hablarlo o no tienen el empoderamiento suficiente como para asumir que forma parte de su vida. "Madre es quien te cría, quien te cuida, se preocupa por ti y te protege. Si tienes realmente el deseo de ser madre, acabas priorizando eso. El deseo de ser madre está por encima de todo lo demás, miedos, frustraciones… Hay que desearlo y confiar en el equipo profesional que te rodea", concluye.

Otras causas por las que acudir a la medicina reproductiva

Hay más motivos que pueden llevar a necesitar ayuda de la medicina reproductiva, como es el caso de las mujeres que deciden ser madres sin pareja o las parejas de mujeres. En estos dos tipos de pacientes se necesita la donación de semen, pero los tratamientos son los mismos: inseminación artificial o fecundación in vitro, incluso habrá casos en los que, por el diagnóstico de la paciente, sea necesaria la doble donación de gametos: óvulos y espermatozoides.

Por otro lado, las parejas de mujeres tienen a su disposición un tratamiento exclusivamente diseñado para ellas, para que vivan este proceso juntas e igualmente involucradas. Se trata del método ROPA (Recepción de Ovocitos de la Pareja). El procedimiento en sí es igual que una FIV, con la particularidad de que una es la madre genética, la que aporta el óvulo; la otra es la mamá gestante, es decir, a la que se transferirá el embrión. 

Si deseas ser madre, sin duda IVI es el mejor lugar para lograrlo. Pide cita aquí para realizarte un diagnóstico de fertilidad.

tracking

No te pierdas...